Para empezar...

Como ya lo había mencionado en publicaciones anteriores, muchos dudan que sea posible crear una empresa cuando se es tan joven, así que aquí va la historia en detalle para mostrar que es posible y que en la vida solo hace falta tener ganas y estar motivado.

Un emprendedor ve oportunidades donde otros solo ven problemas.

— Michael Gerbe

¿Qué me llevo a tomar la decisión?

Cuando estaba en cuarto año de la universidad, en octavo semestre para ser más exacto, llegue al momento donde empiezas a querer la independencia económica, pero justo ahí es cuando te encuentras con la realidad, un situación laboral bastante limitada ya que no contaba con disponibilidad horaria completa porque aún estaba en clases de la universidad, tenía que terminar mis prácticas, que encima, no eran remuneradas y además, no tenía ninguna experiencia laboral; un panorama bastante desalentador a decir verdad. Ninguna de las opciones que encontraba era realmente satisfactoria; en ese momento tan joven y con tanto entusiasmo decidí que emprender mi propio negocio era no solo la mejor sino la única opción.

Donde hay una empresa de éxito alguien tomó alguna vez una decisión valiente.

— Peter Ferdinand Drucker

¿Por donde empezar?

Pase un mes completo investigando diferentes sectores y haciendo número, porque tengo que decirlo, no contaba con mucho capital, como es usual cuando empiezas una empresa. Para empezar tenía que evaluar detenidamente la inversión que necesitaba; después de hablarlo con mi padre y con mi pareja (quien además, se encontraba descontento con su trabajo actual) decidimos atender una necesidad que presentaba en sector de transporte desde hacía un tiempo. Tras muchas horas de trabajo, investigación y formación propia en temas administrativos que eran indispensables para empezar, abrimos la tienda de repuestos AUTOBUS. Mi pareja, quién con un voto de confianza que ahora valoró más que nunca, dejó su trabajo y emprendimos juntos está nuevo reto. Con sus ahorros y un prestamos de dinero compramos los primeros productos, informándonos bien de cuales era los de mayor demanda y podían darnos movimiento rápido de dinero, porque en ese momento no podíamos permitirnos tener mercancía parada por mucho tiempo. Yo, me encargue de lo que mejor sé hacer, construimos una marca sólida, planeamos estrategias de comunicación para entrar en un sector donde por fortuna no teníamos mucha competencia (en ese entonces, porque ya no es así) y empezamos a vender a puerta fría.

Si puedes soñarlo, puedes hacerlo.

— Walt Disney

Y entonces...

Hoy, después de cerca de 4 años, nuestro negocio sigue en pie. Yo salí del país pero mi pareja ha hecho frente a todos los temas administrativos y los lleva a la perfección, yo me hago de la comunicación, temas de diseño y marca pero debo darle los créditos a él, quien es la persona que está día a día luchando para hacerlo crecer. Han sido años llenos de alegrías y preocupaciones pero también años en los que hemos aprendido miles de cosas. Ahora, tenemos varios proyectos en mente y proyectamos grandes cosas con el almacén.

Prometo contar y dar noticias (espero que todas buenas), de las novedades de Repuestos AUTOBUS!